miércoles, 1 de junio de 2011

Sobre el "mal menor" y el "voto útil"

Tanto a nivel nacional como a nivel de la provincia de Neuquén, hay partidarios del llamado "mal menor", votar a Cristina para que no gane Macri (antes de que se bajara de la candidatura presidencial) u otro derechista. O votar a Farizano para que se vaya el MPN. En el caso de Neuquén hay una discusión específica, que abordamos anteriormente en este blog, sobre cómo hacer para terminar con la hegemonía emepenista. Al día de hoy, la táctica de no hacer olas para sacarlo con los votos en 2011, alentada por la CTA y la oposición burguesa (sin perjuicio de la interna entre la UCR y el UNE) demostró ser funcional a la consolidación de la "gestión" de Sapag, que aprovechó la paz social del 2010, junto con las buenas relaciones con el gobierno nacional y el "megayacimiento" recientemente anunciado con bombos y platillos. En el caso de Cristina, incluso algunos compañeros que apoyan al Frente de Izquierda para que pase la proscripción de las primarias, proponen votar lo menos malo para los trabajadores en la segunda vuelta de la elección nacional.

Sin embargo, este argumento que suele empalmar con cierto sentido común que busca elegir entre "lo que hay", prescinde de la situación de conjunto por un lado y de un punto de vista de clase por el otro ¿Qué sentido tiene optar entre ser reprimido con la policía o mediante causas por el art. 194 del Código Penal? Podría decirse que hay una diferencia sustancial entre ser reprimido físicamente y jurídicamente. Sin embargo, el kirchnerismo también apeló a la represión física en el Casino, Kraft, Parque Indoamericano, contra los Qom, etc, incluso con muertos. Además del asesinato de Mariano Ferreyra perpetrado por la burocracia aliada del gobierno y luego caída en desgracia. O sea su política de reprimir "con el Código Penal" es preventiva y se trasnformará en represión lisa y llana cuando haga falta. En este sentido, optar por el "mal menor" termina siendo una cuestión de bajar las expectativas hasta terminar aceptando la primacía de los bandos capitalistas en disputa como algo dado, en lugar de promover una política de independencia de clase.

Antonio Gramsci, que suele ser citado tanto por marxistas como por burgueses como un gran cientista político, afirmaba que: "Hay siempre un mal menor respecto de aquel predecentemente menor y frente a un peligro mayor respecto de aquel precedentemente mayor. Cada mal mayor deviene menor frente a otro mayor y así al infinito. No se trata por tanto de otra cosa que de la forma que asume el proceso de adaptación a un movimiento regresivo, cuyo desarrollo es conducido por una fuerza eficiente, mientras la fuerza antitética está decidida a capitular progresivamente, en pequeñas etapas, y no de un sólo golpe, lo que llevaría, por el efecto psicológico condensado, a hacer nacer una fuerza competidora activa o a reforzar la ya existente"  (Cuadernos de la cárcel, cuaderno 9, parágrafo 7 "Argumentos de cultura. El Mal Menor").

Capitular progresivamente en diversas etapas frente a un movimiento regresivo, con el resultado de bloquear el surgimiento de una fuerza activa antagónica al partido del orden. Agrego entonces, que de esta forma se prolonga la dominación política del bando predominante (no digo hegemónico porque el kirchnerismo puede verse más como el resultado de una crisis de hegemonía de conjunto que como expresión de una hegemonía estable, etc.). Por eso no tiene sentido apoyar al Frente de Izquierda en las primarias para después apoyar a Cristina en Octubre. Ni votar en Neuquén por Farizano para que no gane el MPN. 

Ambas formas de optar por el "mal menor" se terminarán volviendo en contra de los trabajadores. Sobre todo teniendo en cuenta la política que Cristina viene anunciando hacia las protestas y los reclamos sindicales, con la mayor cantidad de procesados por luchar que haya habido en "democracia".

Como bien señala una carta publicada por importantes referentes de ATEN la semana pasada: "Para los que dicen que el 'voto útil' es optar por alguna de las variantes patronales, respondemos: El  kirchnerismo ha hecho frentes espurios a través de las colectoras, con cualquier sector, sin discutir programa alguno sin principios con el único objetivo de no dejar el poder; el radicalismo con De Narváez en Buenos Aires, buscando sólo llegar al poder. No son una alternativa para los trabajadores ¿'Útil' para quién es ese voto?  Si este frente lograra tener representantes en el parlamento, podrían llegar desde diferentes puntos del país a rodear de solidaridad cada conflicto con el dinero que es de todos y que los diputados de la burguesía usan para beneficio personal. Ese es el 'voto útil' para los trabajadores."

Esta discusión política tiene que trascender la campaña del Frente de Izquierda y de los Trabajadores para abrir un debate en los sectores combativos del movimiento obrero, el movimiento estudiantil, la intelectualidad de izquierda y los artistas, sobre cuál tiene que ser el proyecto político y la estrategia de la izquierda. En este sentido, es fundamental dejar asentado un mojón de independencia de clase respecto de todas las variantes patronales, como condición de cualquier construcción hacia el futuro, como bien lo expresan en Neuquén las candidaturas de los compañeros de Zanon, Alejandro López y Raúl Godoy. 

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Juan, un comentario...
En primer término te referís a quienes dicen que apoyarán al FIT en las primarias y luego a Cristina en segunda vuelta. Luego decís que no tiene sentido apoyar al FIT en primarias y a Cristina en Octubre. Me parece que tal como está expresado, quedó confuso el asunto, porque la elección de octubre no es una segunda vuelta, sino la primera vuelta de las elecciones generales...Incluso para quienes decidan votar al FIT en la primera vuelta de las elecciones generales, ¿cuál es el llamado del FIT ante una segunda vuelta que plantee un escenario que tenga a CFK y a los Radicales? ¿votar en blanco porque son dos partidos del régimen o apoyar a Cristina?
Tito

JDM dijo...

Estimado Tito, es cierto que no es lo mismo apoyar al FIT hasta zafar de las primarias, que apoyarlo en la elección presidencial y luego apoyar a Cristina en segunda vuelta. En el primer caso sería una "ayuda" democrática que se terminaría una vez pasada la primaria. En el segundo sería dar apoyo al "menos malo" en la segunda vuelta cuando hay solamente dos opciones.

Pero la diferencia es sutil y ambas posiciones tienen la misma lógica del mal menor.

Desde ya no estamos en condiciones de rechazar votos, aunque sean solamente en la primaria, pero la propuesta del FIT es por la independencia respecto de todo bando patronal, con lo cual si Cristina fuera a segunda vuelta contra la UCR, la posición clasista consecuente sería votar en blanco o nulo y nuestra propuesta es apoyar al FIT tanto en la primaria, como en la elección nacional y eventualmente si hubiera segunda vuelta mantener una posición clasista, sin caer en la línea de apoyo al "mal menor".
Abrazo. Juan.