Intentaremos, seguramente con poco éxito, no repetir muchas obviedades.
-Está clara la derrota del gobierno y el intento de crear una "mística 2009" resulta bastante dudoso por motivos varios. Entre ellos, el principal motivo, es que a esta declinación política del kirchnerismo no puede responderse solamente reflotando una cierta agenda "progresista" como hizo NK después de la derrota con De Narváez. El resultado electoral muestra los límites que tiene la táctica de mimetizarse con el adversario, pero la existencia misma de esta táctica, muestra el debate político en el peronismo corrido decididamente hacia el centro-derecha.
-Si bien todo el mundo dice que en estas elecciones ganó la moderación, contra el supuesto "izquierdismo" cristinista, lo cierto es que sería un error caracterizar la elección como un vuelco a la derecha sin más. El voto a Massa expresó de todo un poco, incluido cierto descontento de sectores obreros. Y de conjunto, aunque el discurso "anti-político" o "pro gestión" es ideológicamente más retrógrado que el de la "politización" que esgrimía la izquierda K, creo que se puede decir que hay un proceso de politización bastante amplio, motorizado por la declinación del oficialismo y todas las cuestiones que de ella se derivan.
-El discurso de CFK (Daniel esto, Daniel aquello), deja la impresión de que una vez más, por el lado del oficialismo, todos los caminos conducen a Scioli, para mayor amargura de los progres del kirchnerismo. Sin embargo, esto tiene sus problemas. De acá a Octubre, se puede descartar que un sector de votos de De Narvaez vayan a Insaurralde, mientras no se puede descartar que sí vayan hacia Massa. O sea que la única posibilidad que tiene el oficialismo de achicar la diferencia es trabajando sobre los votantes del propio Massa, lo cual incluye más mimetización, etc. Lo más probable es que el cristinismo vaya por una "derrota con honor" en la PBA, para de ahí negociar las condiciones de la "sucesión". Tengo muchas dudas de que Scioli sobreviva sin más en ese panorama, pero más dudas tengo de que el kirchnerismo sobreviva sin él.
-Sobre el FIT, cuya performance es sin duda lo más novedoso de la elección y se puede ver más en detalle acá. La consolidación de un "espacio" electoral de la extrema izquierda a nivel nacional, plantea varias cuestiones para pensar. Desde la perspectiva de este blog, en el desarrollo del FIT confluyen distintos fenómenos políticos, de distinta calidad y envergadura. Como marco general, el clima de "fin de ciclo" (aunque ralentizado por la relativa estabilidad económica), fortalece el "voto bronca" u opositor en general. La crisis de la centroizquierda, fagocitada por el kirchnerismo desde el 2003 en adelante, es otro de los elementos que influyen en la emergencia de la extrema izquierda como actor político. La recomposición de la fuerza de la clase obrera, el desarrollo del "sindicalismo de base" y la inserción de la extrema izquierda (en particular el PTS) en el mismo y más en general el hecho de que sea una izquierda con una cierta inserción en sectores concretos del movimiento obrero y el movimiento estudiantil, también juega un papel. Queda por verse la cuestión de hasta donde este "nuevo espacio" decanta en "nuevas fuerzas", para lo cual no solamente está planteado que el FIT mantenga su buena performance electoral en Octubre, sino también organizar lo más que se pueda (mediante comités de apoyo, reuniones abiertas, etc.) de esos compañeros y compañeras que depositaron en nosotros un voto de confianza.
2 comentarios:
Copio a continuación un comentario de Facundo Aguirre, que me hizo llegar por mail, a quien le agradezco sus observaciones:
"No coincido. Si como decís Insaurralde es el calco de Massa y la elección se dividió entre Massa, Insaurralde y la centroizquierda sojera (ni hablar Mendoza donde gano Cobos y el FIT ocupo el espacio vacante del centroizquierda) entonces tenemos un voto más a la derecha que en el 2011 cuyo eje era el Nunca Menos. Que a Massa lo voten obreros no lo hace más confuso, sino que indica que un buen sector de la clase obrera que lucha -mayormente por sus intereses corporativos y por eso aplauden a Moyano cuando ataca "los planes descansar- indica que su sentido común sigue siendo fogueado por la derecha, aunque socialmente se manifiesten por izquierda. Y esa es la contradicción que la izquierda tiene que atacar.
El FIT hizo una gran elección y eso plantea la tarea de meter diputados de la izquierda y de redoblar la organización por abajo de la clase. El tema es evitar repetir una campaña donde los dinosaurios del PO empacados en ser pro regimen la hegemonicen.
Saludos"
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