jueves, 29 de diciembre de 2011

Contra la brutal represión en Santa Cruz

Desde el Partido de los Trabajadores Socialistas, repudiamos la brutal represión sufrida por los trabajadores estatales de Santa Cruz. 


Los trabajadores docentes y estatales de Santa Cruz fueron brutalmente reprimidos por la infantería con gases lacrimógenos y balas de goma cuando se manifestaban contra el paquete de ajuste “noventista” de “emergencia económica” que, entre otras medidas, sube la edad de jubilación de los empleados públicos en unos 10 años promedio, presentado en la legislatura por el Gobernador “K” Daniel Peralta. 

En la misma tónica otro gobernador K, Carlos Soria, presentó y se votó por mayoría en la Legislatura de Río Negro un proyecto de ley de Emergencia institucional, económica, financiera, administrativa y social que propone entre otros aspectos el pase a disponibilidad de todos los empleados de la administración pública. 

Tanto el gobierno nacional como los gobiernos provinciales están demostrando que están dispuestos a que seamos los trabajadores/as los que paguemos las consecuencias de las crisis y criminalizar la protesta social. Así lo demostró el gobierno de los “derechos humanos” y del “proyecto nacional y popular” desde su discurso de reasunción lanzando una cruzada contra los gremios y los trabajadores/as que luchamos por nuestros derechos. La votación de la “ley antiterrorista” es parte de esta cruzada: Es un nuevo armado legal contra las luchas de los que resistan al ajuste que llaman “sintonía fina”. 

Llamamos a todas las organizaciones sociales, políticas y de Derechos Humanos a sumarse a la Radio Abierta a realizarse el día viernes 30 de Diciembre a las 10 hs. en Olascoaga y Sarmiento en repudio a la represión de los trabajadores estatales en Santa Cruz. 

Esta acción tiene que ser un primer paso en el lanzamiento de una gran campaña nacional contra la criminalización de la protesta social, por la anulación de la ley antiterrorista, por el desprocesamiento de todos los luchadores obreros y populares.

Balada del Diablo y de la Muerte

Homenaje a la esquina de mi barrio...



miércoles, 28 de diciembre de 2011

Conversa con mi vieja

Los de San Lorenzo están locos ¿Viste las pintadas que pusieron? Arreglá el techo que te serruchamos el piso. Esto es Tierra Santa.... Quieren volver a poner la cancha acá ... El otro día un conocido me dijo que iba a venir a Carrefour y le dije que está cerrado ¿Cómo sabés? me preguntó. Porque vivo ahí. Y me dice, Ah vos vivís en un barrio de regular tirando para abajo ¿Vos podés creer? ¿Cómo un hombre le va a hablar así a una mujer? Se ve que soy de otra época...
Encima ahora el chino ladrón puso todo ocho veces más caro. Y si llevás pocas cosas pone cara de disgusto. Todo sale cada vez más caro. Y el gobierno hace como que no hay inflación. Y el caradura de Pacho O' Donnel que era menemista y ahora dirige el Instituto de revisionismo histórico ¿porque no hace la revisión de él mismo?

martes, 27 de diciembre de 2011

Amor y Paz (dos diálogos superpuestos que tal vez ocurrieron)

-... Así que no hables boludeces....
-Señor, le tengo que notificar que lo procesaron por el delito de Amenazas...
-Fiera, calmate, no te hagas el pulenta
-¡Eh! Flaco ¿como puede ser que me procesaron? Acá siempre perjudican al hombre...
-Yo no me hago, soy pulenta. A vos te atiendo cuando quieras...
-No grite señor, acá no se puede gritar. Además no sirve para nada. Le doy una copia de la resolución y vaya a consultar con el Defensor...
-Atendeme ahora, pelotudo...
-Pero cómo puede ser lo que vos me estás diciendo ¿Encima tengo que ir a ver al defensor? ¡Sabés todas las cosas que tengo que hacer!
Pará, flaco, pará!
-Si no se anduviera metiendo en líos amenazando a su ex mujer, no tendría que estar acá....
-¿¡No era que sos pulenta?! La próxima te mato, cagón, andá a lavarte la cara...
... Acá tiene la resolución. Lo acompaño a la Defensoría...

Armagideon Time

Temazo en el camino del Samurai...

viernes, 16 de diciembre de 2011

Pase corto sobre Cristina, Moyano y la naturaleza ambivalente del peronismo

Los argentinos (incluidos los troskos y clasistas) nos reímos muchas veces de los yanquis y europeos que llegan al país preguntando "qué es el peronismo". 

Bueno, no sé si la generalización es muy científica. A mí por lo menos me dan bastante risa ... pero es la diferencia entre ser del barrio y ser de afuera...

Sin embargo, reconozco contra todo tercermundismo que la pregunta por el peronismo tiene que ver con su ejercicio, inédito en otros países, de la dominación política. En ese ejercicio, los muchachos han demostrado tener una notable capacidad de adaptación a las circunstancias y una también notable voluntad de poder, o en términos gramscianos (más cercanos al marxismo), de "espíritu estatal".

Creo que la escalada entre Cristina y Moyano, de la que anticipamos algunos elementos acá y comentaron en términos más concretos el Fer y Octavio acá y acá, aporta algunos elementos para pensar sobre este tema, o sea sobre el problema de la próxima configuración del peronismo que se preanuncia en estas escaramuzas y si este aparato resiliente y lleno de cicatrices, pero cuestionado a su vez, se la va a bancar. 

Más allá de la coyuntura, el enfrentamiento entre Cristina y Moyano expresa  la contradicción inherente a la doble naturaleza del peronismo: es a la vez "partido del orden" y "partido de la contención", defensor a ultranza del orden capitalista y promotor del único "reformismo posible" en suelo argento. 

Desde ya que como decía Hegel (que podría ser una especie de peronista o un gramsciano de derecha antes de la socialdemocracia y el peronismo) no se puede evitar el trabajo de lo negativo. O sea que en un país como la Argentina, salvo con dictadura militar, no se puede ser "partido del orden" sin ser un poco "partido de la contención" y viceversa (problema serio de los gobiernos radicales que se enteran de los conflictos por la televisión). El peso específico de cada polo y su predominancia respecto del otro (más contención que orden o al revés), depende de las relaciones de fuerzas más generales entre la clase trabajadora, la burguesía (anti) nacional y el imperialismo, como bien señalara Trotsky en sus conversas con los trotskistas yanquis y mexicanos. Pero si no lo hubiera dicho el Viejo, la historia ha mostrado que es así. Ejemplo a continuación:

La carnicería social infame llevada adelante por el menemismo hubiera sido imposible sin Reagan, Tatcher y Gorbachov, sin el neoliberalismo y la caída del Muro, que dieron la tónica de todo un período de retroceso de las conquistas obreras, conocido como de "restauración burguesa"

Cristina se puede proponer reeditar una suerte de "alianza menemista" con un sector de la burocracia sindical más dócil aún que Moyano, pero el movimiento obrero argentino, a diferencia de los años '90 e incluso del 2001, no ha sufrido derrotas categóricas en los últimos años (salvo procesos muy de vanguardia que no impactaron en la relación de fuerzas con las masas). O sea, que está difícil para el gobierno y la burguesía avanzar en toda la línea contra las condiciones de vida de los trabajadores sin un alto costo político que puede acelerar la crisis interna del peronismo. 

¿Cuánto de Pacto Social y cuánto de ataque más directo se propone Cristina? A nivel de masas, es pacto social, claramente en beneficio de los empresarios, como lo demuestran sin querer los propios K que plantean que los empresarios están ganando mucha guita y no da para el techo al salario; y a nivel de los sectores más organizados y de vanguardia es ataque directo como con la votación de la ley anti-terrorista

Tomando en cuenta estos elementos, es muy probable que durante el año que viene se terminen de definir los rasgos principales de la próxima fisonomía del peronismo y del régimen político más de conjunto. Las señales del gobierno son claras: el partido del orden primará sobre el partido de la contención. Por eso, la crisis con Moyano puede ser una cierta crisis con los sindicatos de conjunto, si para la burocracia se hace muy insostenible la aplicación de la línea política oficial en la base y empiezan a brotar zurdos y troskos como hongos. 

Y ahí los quiero ver...

martes, 13 de diciembre de 2011

La nueva etapa cristinista, el movimiento obrero y la izquierda

La asunción de Cristina al frente de la presidencia de la Nación durante un nuevo período, el contenido de su discurso, los debates del XII Congreso del PTS y la asunción de la banca del FIT en Neuquén, con fuerte impronta de la lucha ceramista, dejaron varios temas para seguir pensando. Algunos los intentaremos abordar en este post. 

Cristina piensa que puede hacer "la gran Menem" dosificadamente y con otro discurso. Ganó prometiendo el Nunca Menos y ahora reclama el fin de las huelgas y los reclamos obreros. Eligió su blanco con toda claridad. Pero quizás en este rumbo elegido se ponga a prueba la diferencia entre la realpolitik peronista y el politicismo frepasista abstracto, es decir la diferencia entre un aparato de control que conoce las fuerzas materiales bajo su mando y una lógica de la política mediática, que con la foto del 54% en mano, actúa sin tropa propia suficientemente cohesionada y extendida. NK fue un exponente de la primera variante ¿Lo será Cristina de la segunda? Cuenta a su favor con el conformismo social extendido, conquistado durante los últimos años. La crisis internacional, la relativa recomposición de las fuerzas del movimiento obrero y la crisis de la burocracia sindical, le juegan en contra.

La pelea con Moyano, que podría ser la punta del iceberg de una relación de crisis con la burocracia más de conjunto, tiene distintas aristas. Tomaremos para la reflexión el hecho de que el gobierno necesita sindicatos disciplinados que garanticen la aplicación en la base del "giro a la derecha". Pero el desprestigio de la burocracia en el contexto actual, hace muy difícil que estos "buenos muchachos" puedan bancar un ciclo de "transformismo" filo-menemista, que podría generar en otros gremios movidas como la que golpeó de lleno a  Daer en el STIA, donde brilla ese exponente del sindicalismo de base, clasista y de izquierda que es la comisión interna de Kraft. Si los costos políticos del ajuste pueden ser grandes para Cristina, mayores aún lo serán para los burócratas sindicales.
 
En este sentido, si Moyano pasase a la oposición abiertamente, cabe destacar que algunos paros nacionales bien organizados, estando o no a la cabeza de la CGT,  podrían limar el 54% en proporciones no menores, según el nivel de generalización del descontento con las nuevas medidas del gobierno que van a impactar (quita de subsidios) de lleno en los sectores medios. Las acciones de envergadura de sindicatos con peso en la distribución como Camioneros crearían un escenario de confrontación que podría compararse con el combate en la llanura que describe Clausewitz. Cada acción a nivel nacional, tendería a crear mayor homogeneidad en las filas obreras, extendiendo la politización contra las medidas del gobierno y un cierto sentido común de resistencia sindical receptivo a las ideas de la izquierda. Con la cobertura de los paros generales, la izquierda clasista podría avanzar sobre la base de que el proletariado se vuelve actor en la escena política nacional. La burocracia en este caso controlaría más por arriba que por abajo, con el riesgo de que el movimiento generalizado la rebasase en los lugares donde tiene más crisis y se extendiera el sindicalismo de base.

Si no hay acciones nacionales porque Moyano termina negociando y se dan conflictos parciales más o menos aislados, aunque existan tendencias a la generalización que la burocracia intentará ahogar (pienso por ejemplo en docentes y estatales) los combates de clase tendrán más fisonomía de lucha de montaña, porque a falta de una acción centralizada común y homogénea, la iniciativa de cada combatiente será la principal reserva material y moral de la clase obrera, teniendo como protagonistas a las comisiones internas y cuerpos de delegados. En un escenario así, puede haber más derrotas duras por concentración de fuerzas enemigas en un punto más o menos aislado (como Casino y Maffissa), pero también posibilidades de que los avances de la izquierda sean profundos producto de la intensidad de las luchas y del desprestigio de la burocracia, fogueándose una vanguardia más dura del sindicalismo de base y clasista, que si sobrevive a los golpes que seguramente sufriremos en un escenario como el descripto, será un activo muy importante en caso de un proceso de luchas más generalizadas en un futuro más bien cercano.

Ambos escenarios podrían darse en forma combinada, dando lugar a hibridaciones diversas de "llanura" y "montaña" (que pueden coincidir parcialmente con las categorías de combate de maniobras y combate de posición, por ej. grandes huelgas nacionales combinadas con recuperaciones de internas o conflictos aislados) en las cuales podrá avanzar el sindicalismo de base, clasista y de izquierda en extensión y profundidad. 

Queda el problema de la experiencia con el peronismo en el poder.  Sigue planteado el tema de que "sobran sindicatos y falta burguesía nacional". Es decir, que se plantea para el peronismo el dilema de cómo resolver la contradicción con su base obrera que se resistirá a la degradación de sus condiciones de vida, sin tener otra forma que no sean los ataques más o menos directos.

Suponiendo que los gobernas feudales y los intendentes mazorqueros se mantuvieran leales en un escenario de disminución significativa de la popularidad del gobierno, éste buscaría compensar el descontento de los asalariados con el apoyo de los pobres urbanos, lo cual se preanuncia en el tratamiento que hace Cristina de ciertos conflictos como el del Subte y esconde embrionariamente la forma desarrollada de un enfrentamiento a muerte entre una izquierda con peso en los lugares de trabajo y el movimiento estudiantil y un peronismo con peso territorial, que buscará imponer mediante derrotas la transformación de una franja significativa de los asalariados en nuevos pobres urbanos, a los que sin duda será necesario controlar con más gendarmes y policías.

El peronismo no va a caer por el peso de sus propios elementos de descomposición. Ha demostrado una notable capacidad de maniobra y adaptación a las circunstancias. Si Cristina se separa aún más del PJ tradicional para congraciarse con las capas medias, a su manera lo estará preservando.Y el PJ cuenta con un aparato que, si bien no se caracteriza por la militancia ad honorem, está donde tiene que estar y hace lo que tiene que hacer para mantener el orden. Por eso, la pelea por influenciar, dividir y quebrar la base territorial del peronismo será durísima y exigirá una concentración enorme de fuerzas en los lugares de trabajo y los espacios juveniles, que permita golpear sobre los barrios, por abajo, mientras la clase trabajadora golpee por arriba con acciones nacionales de envergadura.  

Respecto del FIT, se confirma la hipótesis de desarrollo de la izquierda por la vía de las luchas obreras. La dureza que se anuncia hacia el movimiento obrero ubica el escenario de confrontación esencialmente más afuera que adentro del parlamento. 

Quizás más adelante se imponga la consigna de un Partido de Trabajadores frente al surgimiento de sectores obreros tendientes a la independencia de clase pero sin tradición de izquierda. Todavía es música del futuro. 

En lo inmediato, está planteado asociar el FIT a la resistencia obrera, amplificando la idea de la campaña electoral como izquierda que defiende los derechos de los trabajadores. Batallando por la independencia de clase, está planteado estructurar fuertes corrientes clasistas en los sindicatos como parte de la construcción de un partido con una estrategia de hegemonía proletaria clásica. 

La banca conquistada en Neuquén es una gran tribuna en la región para defender esta perspectiva a nivel nacional. 

martes, 6 de diciembre de 2011

Unas líneas sobre programa y estrategia

El cierre abrupto de un debate que se inició acá y que siguió acá, acá y acá ensayado por Pablo Rieznik en la última Prensa Obrera, me dejó pensando sobre lo siguiente: Rieznik dice que Matías Maiello no le respondió sus críticas al libro de Christian Castillo y en cambio se dedicó a plantear una serie de discusiones fuera de lugar. Que es ridículo decir que tenemos coincidencias programáticas pero diferencias estratégicas. Sin embargo, el propio Rieznik menciona al pasar que el PO y el PTS tenemos o tuvimos posiciones totalmente distintas, no ya de caracterización, sino sobre la política a llevar adelante respecto del movimiento piquetero, Zanon, ferrovarios y otros ejemplos. Rieznik parece plantear que no hay que exagerar las diferencias, pero las enumera cada vez que puede. Solamente que no les atribuye una causa inteligible, salvo el "espíritu faccionalista" del PTS. (Somos grandes, capo...)

Pensando un poco sobre esto, creo que la idea de que el programa correcto en general es garantía de una práctica y una estrategia revolucionarias está abonada por los muchos años en que la izquierda trotskista ha tenido que resistir el retroceso en la lucha de clases, lo cual alejó por un tiempo del horizonte la reflexión sobre el enfrentamiento con el "poder real", volviendo la cuestión estratégica algo propagandístico. Sobre esto hemos comentado ciertos tópicos en algunos de los posts que se ubican bajo el rótulo "Entradas más leídas" a mano derecha del lector/a. No vamos a repetir. 

Sin embargo, en las exhortaciones a retomar el pensamiento estratégico de la III Internacional practicadas desde este blog, nos está quedando medio flojo el rol de Trotsky en la lucha por la IV Internacional y la continuidad que ésta dio a las reflexiones estratégicas de la Tercera.

Decíamos acá (y disculpen la autocita pero es más cómodo que escribir todo de vuelta): 

Los dos primeros congresos de la Tercera Internacional se dan en el marco del ascenso originado en la Revolución de Octubre de 1917. En este contexto, el primero sienta las bases de la nueva organización revolucionaria internacional y se separa de manera tajante del reformismo, planteando el objetivo político del poder obrero mediante la dictadura del proletariado. El segundo congreso sigue en la misma línea, en un contexto en que la Tercera Internacional ha profundizado la política hacia las alas izquierdas de los partidos socialistas que se acercan a los bolcheviques y en ese marco, el texto que citamos en el post anterior busca establecer una relación entre la política parlamentaria y la estrategia insurreccional, en la que se delimita de la práctica de los parlamentarios socialdemócratas reformistas.

Entre 1918 y 1920, en los textos de la Tercera Internacional lo central es que la situación de ascenso de la lucha de clases permite articular el objetivo político (poder obrero), la estrategia (toma del poder por la clase obrera mediante la organización de partidos bolcheviques de vanguardia con peso de masas) y la táctica (lucha política con la socialdemocracia) con escasas mediaciones.  Lo central era forjar los partidos al calor del ascenso y tratar de avanzar hacia nuevas revoluciones aprovechando la marea revolucionaria, superando a los reformistas que estaban en bancarrota después de su posición social-imperialista durante la guerra.

Al año siguiente, la derrota de las ocupaciones de fábricas en Italia, el retroceso del Ejército Rojo a las puertas de Varsovia y la derrota de la "acción de Marzo" en Alemania, imponen un viraje a la Tercera Internacional que se resume en la expresión "conquista del poder, previa conquista de las masas". Esta orientación del Tercer Congreso se sintetiza en la política de Frente Único proletario para la lucha por las reivindicaciones elementales de la clase obrera  y tiene como documento central las "Tesis sobre la táctica".

Contra la situación anterior, que acercaba y hacía más inmediatas las relaciones entre objetivo político, estrategia y táctica, la situación de 1921, con el inicio del retroceso del ascenso revolucionario en Europa Occidental impone mayores mediaciones y otorga por ende más peso a la táctica.

Tanto es así, que el Manifiesto de la Tercera Internacional publicado en el Tercer Congreso llama a oponer la estrategia de los trabajadores a la estrategia del capital, asimilando el concepto de estrategia con la preparación cuidadosa de los combates y con la astucia para no entrar en provocaciones en las cuales los comunistas se enfrenten aislados, como minoría armada contra la burguesía y sus fuerzas represivas.

El Cuarto Congreso profundiza esta orientación, agregando la hipótesis del Gobierno Obrero para Alemania, es decir que la forma posible en que se pueda llegar a la dictadura del proletariado en Alemania puede ser la lucha por un Gobierno Obrero, que rompa con la burguesía y arme a la clase trabajadora, acelerando la experiencia de los trabajadores con la socialdemocracia.

Esta orientación se basaba en la idea de que la burguesía era más fuerte en Europa Occidental que en Rusia, que la socialdemocracia tenía una sobrevida política por la reactivación económica posterior al desastre de la guerra mundial y que si bien toda revolución disloca el aparato estatal, éste era más fuerte en Europa Occidental que en Rusia, donde los bolcheviques tomaron el poder contra un Estado burgués en formación dirigido por coaliciones inestables en medio de la dualidad de poderes entre el gobierno provisional y los soviets. Trotsky señalaba que posiblemente, al revés de Rusia, en Europa Occidental se diera primero la guerra civil y después la toma del poder.

Después de la derrota de la revolución alemana del '23, el inicio del "centrismo burocrático" en la Tercera Internacional bloquea toda reflexión estratégica. El V Congreso va a ser el de la "bolchevización" para desplazar y callar a los elementos opositores y el VI Congreso el de la fosilización del programa marxista, criticada por Trotsky, acá. El VII Congreso en 1935 implica la restauración de la política menchevique de alianza con la burguesía, mediante los "Frentes Populares", a lo que Trotsky opone la continuidad de la estrategia bolchevique mediante el Programa de Transición y la Politica Militar Proletaria frente al estallido de la Segunda Guerra Mundial. 

Propongo entonces ver el Programa de Transición, que Trotsky había pensado como un manifiesto programático para orientar a los grupos cuartainternacionalistas, no como EL PROGRAMA en general, sino como la principal respuesta teórico-política al bloqueo de la reflexión estratégica que la burocracia de la III Internacional impuso a partir del V Congreso y desembocó en la colaboración de clases con la burguesía democrática en el VII Congreso. 

Esta continuidad está dada por varios aspectos, entre los que cabe señalar la lucha política con el reformismo, la necesidad del Frente Unico de la clase obrera, los soviets como forma de organización obrera que preanuncia el nuevo estado, el gobierno obrero y campesino como consigna para popularizar la dictadura del proletariado (emparentada pero no idéntica a la consigna de Gobierno Obrero del IV Congreso de la III Internacional), la lucha contra el imperialismo y la guerra. A esto se suman las posiciones elaboradas por Trotsky acerca de problemas concretos de la lucha de clases en Alemania, Francia, España, la URSS, América Latina y Estados Unidos, que no podemos abordar acá. 

Sin embargo, la propia dinámica del Programa de Transición, es decir la movilización sistemática de las masas obreras en alianza con otros sectores oprimidos, utilizando consignas que ligan su reclamo con el cuestionamiento de la propiedad privada, hasta plantear la cuestión del poder, no resuelve en sí misma el problema de cómo se toma el poder. Por eso, programa y estrategia están ligados pero son cosas distintas, que deben ser pensadas con la densidad que corresponde a cada una. 

Esto ya se hizo medio largo y me tengo que ir a laburar. 

Continuará. 

lunes, 5 de diciembre de 2011

Ghetto Gospel

En algún momento cercano volveré a escribir sobre la realidad (o lo que queda de ella). Mientras, va este tema para los pibes con los que laburo todos los días. 



jueves, 1 de diciembre de 2011

Pocas líneas

Anoche celebramos la performance de las compañeras de la Violeta Negra en el Hospital y nos fuimos a la radio. Hablamos con una compañera del MOCASE que, en un castellano antiguo y exquisito como el que se habla en Santiago del Estero, nos contó su lucha contra guardias blancos, grandes propietarios y funcionarios gubernamentales. En los últimos minutos del día, descubrí una forma de hacer la pizza en la plancha (la idea es no usar el horno) sin que se queme la masa. Y esa nimiedad me dio alegría. La Turca dice "¡eso es Boedismo Zen!". Mañana voy a cumplir 34 años. No obstante este nuevo paso en dirección al envejecimiento, descubrimos con el Ale que a veces el tiempo juega a favor y no en contra. Es inevitable que termine el 2011.